Terrible but Terrific Twos

Terribles pero estupendos dos años

Como padre, es posible que haya oído hablar de la infame etapa de los "terribles dos" por la que pasan los niños pequeños. Pero ¿qué son exactamente los terribles dos y por qué ocurren?

¿Qué son los terribles dos años?

El término "terrible twos" se refiere a una etapa del desarrollo que generalmente ocurre en los niños alrededor de los dos años. Durante esta etapa, los niños pueden exhibir conductas desafiantes, como rabietas, rebeldía y cambios de humor.

¿Por qué ocurren los terribles dos años?

Los terribles dos años son una parte normal del desarrollo de un niño, ya que comienzan a afirmar su independencia y a poner a prueba los límites. Esta etapa se caracteriza por un fuerte deseo de autonomía y una falta de control de los impulsos, lo que conduce a la frustración y arrebatos.

Cómo afrontar la terrible etapa de los dos años

Si bien la terrible etapa de los dos años puede ser un desafío tanto para los padres como para los hijos, existen estrategias que pueden ayudar a atravesarla. Establecer límites claros y consistentes, ofrecer opciones y brindar refuerzo positivo para el buen comportamiento pueden ayudar a manejar los desafíos de la terrible etapa de los dos años.

Recuerde que los terribles dos años son una etapa temporal en el desarrollo de su hijo y, con paciencia y comprensión, puede ayudarlo a atravesar este importante hito.

Cambia tus palabras

Hablar de forma positiva es importante en tu vida y en la forma en que hablas con tus hijos. En lugar de siempre darle un giro negativo a todo, cambia tus palabras. Los dos años maravillosos son un buen comienzo y comienza a cambiar la forma en que abordas esta etapa de la vida de tu hijo. Lo mismo se aplica a todas las etapas de su vida. En lugar de decir "Oh, van a ser adolescentes" con el tono negativo sobre lo difícil que será eso, habla de vida con ellos. Siempre habla de manera positiva y te sorprenderás de cómo tu vida cambia en torno a eso.

Tus palabras importan. Piensa dos veces antes de hablar, especialmente cuando hablas sobre tus hijos o por encima de ellos.

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